Sesión Bibliográfica. 01 de Enero de 1998 (9)

En un ciclo normal, la secreción de FSH aumenta al final del ciclo provocando el desarrollo del folículo. Las concentraciones plasmáticas de estradiol aumentan, alcanzando un máximo justo antes de la ovulación. Ejercen un retrocontrol positivo sobre la secreción de LH; se produce un pico de LH que provoca una ovulación al cabo de 16-23h. Las técnicas de estimulación ovárica tenen por objeto restablecer el funcionamiento cíclico del ovario. Como primera elección se usa el clomifeno. Este se fija a los receptores estrogénicos del hipotálamo, ejerciendo un efecto antagonista por lo que se segrega GnRH, que a su vez, provocará la secreción de FSH y LH. El clomifeno se administra por vía oral. En caso de fracaso se recurre a las gonadotrofinas para la maduración folicular preferentemente la FSH i.m. Esta se asocia a las gonadotrofinas coriónicas (HCG) para inducir la ovulación. De estos dos tratamientos para la esterilidad, el FSH+ HCG expone a mayor peligro de hiperestimulación ovárica. Los efectos secundarios de una hiperestimulación ovárica son: aumento de los ovarios, aumento de peso por retención sódica, trastornos digestivos (náuseas, dolores abdominales) y, en casos más graves, síntomas dramáticos que requieren hospitalización.
Palabras claves:
  • OVULACIÓN
  • EFECTOS ADVERSOS
  • TRATAMIENTO
  • FSH
  • HCG
  • ESTERILIDAD

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.