Sesión Bibliográfica. 01 de Enero de 1999 (10)

Los pacientes deben saber que es un tratamiento sintomático cuya eficacia desaparece cuando se interrumpe. Al principio se tiende a instaurar una monoterapia. Actualmente los medicamentos de primera elección son las substancias dopaminérgicas (una respuesta favorable al tratamiento confirma el diagnóstico). La eficacia aparece inmediatamente. Si durante un tratamiento eficaz con levodopa, los síntomas aumentan o si se desarrollan al principio durante el día, se puede pasar a un agonista dopaminérgico como pergolida. Esta substancia también se recomienda como tratamiento inicial a pequeñas dosis (0,15 a 0,25 mg/d en dosis única por la noche), junto con domperidona contra los efectos adversos vegetativos iniciales. En caso de contraindicaciones a los agonistas dopaminérgicos (cardíacas u otras), se pueden introducir opioides como la tildina (VALORON). Si no hay respuesta a estas dos substancias, hay que reconsiderar el diagnóstico. En pacientes jóvenes con síntomas intermitentes, se puede limitar el tratamiento a las ""situaciones de provocación"" (ir al teatro, al cine, viajes largos en avión, etc.). En caso de síntomas diurnos, es preferible un tratamiento prolongado. Algunas formas de ""restless legs syndrom"" son la manifestación de una enfermedad subyacente, que debería tratarse con anterioridad (substitución de hierro en caso de carencia, tratamiento de la uremia en pacientes en diálisis). También se han de tener en cuenta los medicamentos que refuerzan estos síntomas: se han descrito casos de empeoramiento de los síntomas con antagonistas dopaminérgicos como neurolépticos o metoclopramida, o con antidepresivos tricíclicos, así como con café o alcohol. AGONISTAS DE LA DOPAMINA Y LEVODOPA: En varios estudios se ha demostrado la capaciddad de la levodopa (+ inhibidor de la dopa-decarboxilasa) de mejorar significativamente los síntomas subjetivos y para disminuir los movimientos nocturnos de las piernas. La levodopa se administraba a dosis de 100-200 mg, asociada a 25-50 mg de benserazida, en toma única por la noche. Si persisten las interrupciones del sueño con una sola toma nocturna, se puede obtener una remisión de los síntomas durante toda la noche administrando una dosis suplementaria de 100 a 200 mg de levodopa en forma retard (+ benserazida). La eficacia de estos tratamientos es prolongada en el 70% de los casos (no se ha desarrollado tolerancia). No obstante se ha descrito una intensificación de los síntomas con levodopa (fenómeno de ""rebote"" cuando disminuye la eficacia de la levodopa; puede evitarse en parte gracias a las formas retard). Un aumento de la intensidad de los síntomas así como su extensión a otras regiones del cuerpo o su aparición durante el día, se designan con el término ""aumento"". 15 pacientes en los que apareció ""aumento"" después de un tratamiento con levodopa, pudieron ser tratados con éxito con pergolida (PHARKEN), agonista D1, D2). 0,5 mg de pergolida se ha revelado eficaz para el RLS (junto con la domperidona (MOTILIUM) administrada contra los efectos adversos periféricos dopaminérgicos). Asimismo, la bromocriptina, con una posología máxima de 7,5 mg, ha producido una mejoría. Algunos informes hablan también de una posible eficacia del ropinirol (REQUIP), de la cabergolina (DOSTINEX) o del pramipexol (SIFROL).
Palabras claves:
  • ALTERNATIVAS
  • DOMPERIDONA
  • DOSIS
  • EFICACIA
  • PRAMIPEXOL
  • EFECTOS-ADVERSOS
  • PERGOLIDA
  • CABERGOLIDA
  • LEVODOPA

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.