Sesión Bibliográfica. 01 de Octubre de 2004 (63)

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es un síndrome caracterizado por una limitación progresiva del flujo aéreo causado por una inflamación crónica de las vías aéreas y de parénquima pulmonar. En este artículo se revisa su diagnóstico, estadio, pronóstico, y tratamiento. Los principales objetivos del tratamiento incluyen la suspensión del hábito tabáquico, el alivio de los síntomas, la mejora de las funciones fisiológicas y la limitación de las complicaciones, como un intercambio de gases anormal o exacerbaciones de la enfermedad. Dejar de fumar resulta provoca una reducción del 50 % del deterioro de la función pulmonar y es la única intervención que es efectiva modificando la enfermedad. También se recomienda la vacunación antineumocócica y antigripal. En cuanto al tratamiento farmacológico, los broncodilatadores inhalados son la base de la farmacoterapia en el EPOC. Éstos se pueden agrupar según su mecanismo de acción y la duración de acción. Los fármacos de acción corta antagonistas b2 (ej.,salbutamol) o anticolinérgicos (ej., bromuro de ipatropio) producen una broncodilatación de 4 a 6 horas. Los fármacos de acción larga antagonistas b2 como el formoterol o el salmeterol tienen un efecto de 8 a 12 h y los anticolinérgicos de acción prolongada como el tiotropio tienen una duración de acción de 24 horas. En los pacientes con una limitación del flujo aéreo leve y síntomas intermitentes, un broncodilatador de acción corta alivia los síntomas y mejora el flujo aéreo, el salbutamol o bromuro de ipatropio son igualmente eficaces. Los pacientes con una limitación moderada del flujo aéreo se pueden beneficiar de una broncodilatación programada con fármacos de acción larga. Formoterol, salmeterol y tiotropio tienen una eficacia similar. Además, se puede pautar un broncodilatador de acción corta para el alivio de los síntomas agudos. Se debe considerar una terapia combinada (anticolinérgico más antagonistas b2) en pacientes en los que un único broncodilatador inhalado no proporciona un adecuado control de los síntomas. Si los síntomas continúan aunque se utilice una combinación de broncodilatadores inhalados se puede iniciar el tratamiento con teofilina, aunque hay que tener en cuenta que será necesario una monitorización frecuente de los niveles terapéuticos, efectos adversos e interacciones. El papel de los corticosteroides inhalados en el tratamiento del EPOC es controvertido, parece que su uso se debería restringir a los pacientes en los cuales la terapia broncodilatadora no mejora los síntomas o la frecuencia de las exacerbaciones. Los corticosteroides orales no se deberían usar en el tratamiento rutinario del EPOC estable. Otros tratamientos suplementarios son la rehabilitación pulmonar, la oxigenoterapia y la cirugía.
Palabras claves:
  • EPOC
  • Broncodilatadores
  • Terapia inhalatoria

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.