Sesión Bibliográfica. 01 de Enero de 1997 (8)

El hiperparatiroidismo es una alteración endocrina frecuente caracterizada por un exceso de secreción de hormona paratiroidea (PTH) y consecuentemente hipercalcemia, afectando principalmente al esqueleto y a los riñones. El tratamiento del hiperparatiroidismo se considera quirúrgico cuando la concentración sérica total de calcio es 1 mg/dl (0.250 mmol/l) superior al nivel normal, si existe evidencia de patología ósea (por ej. osteítis fibrosa quística), si la densidad ósea está más de 2 SD (desviaciones estándar) por debajo del valor correspondiente por edad y sexo, si existe insuficiencia renal, litiasis renal o hipercalciuria (> 400 mg/día). Los pacientes con sintomatología leve deben tratarse de forma más conservadora. Se debe controlar el calcio sérico cada 6 meses y el calcio y creatinina en orina cada año. También se aconseja monitorizar la densidad ósea a intervalos de 1-3 años. Se recomienda que los pacientes no tomen diuréticos, especialmente tiazidas, y que beban mucho. Es bueno andar. Teóricamente, debe evitarse una ingesta elevada de calcio, sin embargo, si la dieta es muy pobre en calcio, puede desencadenar secreción de PTH. Mientras no exista más información, se recomienda una ingesta moderada de calcio, evitando suplementos de calcio y vitamina D. No existen tratamientos específicos, seguros y eficaces para el tratamiento crónico del hiperparatiroidismo. Los suplementos de fosfato oral pueden disminuir la hipercalcemia y disminuir la excreción urinaria de calcio. En mujeres postmenopáusicas se postula que los estrógenos pueden ser útiles. Para la hipercalcemia aguda es útil el tratamiento con bisfosfonatos y calcitonina, pero parece que no tienen efecto a largo plazo.
Palabras claves:
  • TIAZIDAS
  • DIETA
  • CALCIO
  • EJERCICIO

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.